¿Quién no conoce estos maravillosos pastelitos? La receta es portuguesa y la encontré entre viejos recortes de cocina; quise rememorar viejos tiempos y voilá, este es el resultado.
Hojaldre y una fina crema horneada que recuerda al sabor de las natillas aromatizadas con canela y limón.
Son sencillos pero hay que utilizar un molde adecuado, yo me serví de unas flaneras de silicona que desmoldan fantásticamente y a pesar de ello, el hojaldre se rebeló un poquito. No aconsejo desmoldar hasta que el pastelito esté completamente frío.
Ingredientes (10 pasteles):
1 lámina de hojaldre (cuadrada)
3 yemas de huevo XL
200 grs de azúcar
125 ml de agua
250 ml de leche fría
30 grs de harina
1 palito de canela
piel de 1 limón
Preparación:
En una ollita ponemos el agua y el azúcar, sin remover lo dejamos hervir durante unos 5 minutos, pasado ese tiempo lo retiramos el fuego y reservamos.
Llega el momento de disolver la harina y lo vamos a hacer en leche bien fría, la idea es que usemos una parte del total de la leche para esta operación y es importante que nos quede más bien líquida, no espesa para que luego se disuelva mejor.
El resto de la leche lo pondremos a hervir con la piel del limón y el palito de canela y en cuanto rompa a hervir vertemos la harina disuelta en leche sin dejar de remover con unas varillas manuales (yo prefiero hacerlo fuera del fuego). Removemos muy bien y luego lo llevamos de nuevo al fuego hasta que comience de nuevo a hervir.
Apagamos el fuego y lo retiramos, procediendo a verter el almíbar en hilo mientras vamos mezclando con las varillas, habrá de hacerse muy bien. A continuación lo colamos usando un colador de malla y lo dejamos templar. El resultado viene siendo el de una crema bastante líquida, no espesa.
Precalentamos el horno a 240º.
Entre tanto, procedemos a forrar los moldes (yo lo he hecho como he visto en internet, es decir enrollando el hojaldre sobre sí mismo y procediendo a cortar porciones de unos 2,5 cms) ponemos dentro de cada molde una porción de hojaldre y presionamos con los dedos de tal forma que quede cubierto el fondo y las paredes del molde (no es necesario llegar hasta arriba). Es importante que los bordes queden más gruesos para que no se salga la crema durante el horneado.
Batimos ligeramente las 3 yemas y procedemos a pasarlas por un colador y mezclar sobre la crema que ya teníamos preparada.
Con esta crema rellenamos el hojaldre hasta los 3/4 (esto es muy importante para que no se nos salga el relleno)
Metemos al horno precalentado a 240º durante unos 15 ó 20 minutos hasta que los bordes estén dorados. Se desmoldan fríos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario